Nota de Prensa No 378 de diciembre de 2020

El profesor Raúl Rodríguez Martínez se considera responsable y comprometido con su deber en el trabajo, se describe como alguien a quien le molesta la impuntualidad pues piensa que cumplir con los horarios establecidos, es la virtud de coordinarse para desarrollar los objetivos trazados.

Nació en Floridablanca, Santander en el seno de un hogar creyente, conformado por Saturnino Rodríguez y María del Carmen Martínez, personas trabajadoras del campo que lograron sacar adelante una familia de 10 hijos con todo el amor y dedicación, inculcándole una formación basada en la hermandad y la bondad como base de todo principio en la vida.

Una de sus hermanas quien era maestra en una vereda del municipio de Lebrija, lo llevaba como acompañante a sus clases, allí descubrió que él a sus 5 años aprendía con agilidad las lecciones impartidas de lectura y escritura. Sus estudios de primaria y secundaria los culminó en el colegio Coomultrasan en la ciudad de Bucaramanga. Es profesional en Bacteriología y Laboratorio Clínico de la Universidad Industrial de Santander y con el apoyo de nuestra casa de estudios pudo realizar su Doctorado en Microbiología y Genética Molecular en España.

Después de trabajar en diferentes cargos en otras instituciones, para el año 2002 se incorporó a la Universidad de Pamplona el 1 de marzo, y hasta el día de hoy lleva 18 años trabajando en nuestra Alma Mater. Ha sido Director del programa de Bacteriología y Laboratorio Clínico, ha realizado trabajos de investigación, se ha desempeñado como Decano de la Facultad de Salud y ahora está asumiendo la dirección de los Laboratorios CEDIMOL de nuestra casa de estudios encargados de realizar el diagnóstico molecular de Covid-19.

Con una gran sonrisa y luz en sus ojos, el profesor Raúl Rodríguez nos cuenta que está felizmente casado y tiene una hermosa hija de 9 años a quien menciona con todo el amor, dice sentirse orgulloso de ser su padre y saber que cada noche lo esperan en casa, para él es algo maravilloso y motivador.

Es un hombre activo y lleno de energías a quien le ha gustado el deporte toda su vida, aun lo practica saliendo a montar bicicleta y trotar por las mañanas. Otra pasión que tiene desde adolecente es cantar, escribir poemas y canciones, actividad a la cual se dedica en sus tiempos libres componiéndole a su hija y esposa quienes son su mayor inspiración.

Agradecimiento, bendiciones y éxitos son los deseos que el docente tiene hoy en día para la Universidad de Pamplona en el reto de la Acreditación Institucional, “sé que lo lograremos con la ayuda de las diferentes dependencias que trabajan arduamente por lograr este reto y esto nos permitirá seguir creciendo como Universidad líder de la región”.

Katherine Botello Díaz
Oficina de Comunicación y Prensa