Manos para la paz, es una iniciativa de la alta consejería para el postconflicto que cuenta con el apoyo del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo en Colombia (PNUD), que tiene como objetivo “fortalecer las capacidades de construcción de paz, el desarrollo y el bienestar colectivo a través de iniciativas y proyectos en territorios vulnerables”.

La Universidad de Pamplona ha sido un aliado estratégico y se ha vinculado al programa Manos para la Paz, enviando estudiantes dispuestos a realizar sus prácticas profesionales en un municipio fuera del departamento Norte de Santander, durante 4 meses en el primer semestre de 2017.

Conscientes del rol protagónico que cumple la comunidad universitaria en este escenario; los estudiantes del programa de Comunicación Social campus Villa del Rosario, Angely Castaño Jauregui, Jessica Daniela Suárez, Juan Chacón Duarte y Daniel Parra Villamizar, decidieron sumarse a esta iniciativa apoyando el trabajo que se realiza en los territorios de Popayán, Chocó, Sucre y Tolima, como puentes comunicativos, visibilizando iniciativas y proyectos en torno a Desarrollo, paz y reconciliación, Lucha contra la pobreza y por la equidad, Fortalecimiento de la gobernabilidad democrática, Energía y protección del medio ambiente, para vincular a ciudadanos y ciudadanas comprometidos con el desarrollo del país en las estrategias que abarca el proyecto en cada ciudad.

La estudiante Daniela Suarez, se encuentra en el territorio de Quibdó Chocó, trabajando en el proyecto de fortalecimiento institucional “Mesa de paz y posconflicto”, que pretende crear una agenda que le permita como departamento responder al posconflicto en tres puntos importantes: implementación de los acuerdos en enfoque ético, la reivindicación social, la reparación integral de las víctimas y el territorio.

Angely Castaño, estudiante del programa, se encuentra en la ciudad de Popayán, pertenece al campo interdisciplinar del proyecto “Reducir la vulnerabilidad a las personas de la depresión momposina”, que tiene como fin que las personas tomen conciencia y empecen a utilizar las estrategias que abarca el proyecto, debido a que en los años 2010 y 2011 se vivió en este territorio la inundación más grande que tuvo Colombia por los cambios climáticos.

“Conocer estas realidades me emociona, porque siento que con mi carrera puedo apoyar, no solamente a multiplicar y a visibilizar las situaciones de un proyecto, sino que las cosas que aprendí en la academia no me sirven si no me apropio de la realidad, no solo de mi territorio y departamento sino en Colombia, y que es importante conocer el contexto, es importante volar para poder aceptar y aportar” expresa Angely Castaño.

Daniel Parra Villamizar hace parte del proyecto “Uso sostenible y conservación de la biodiversidad en ecosistemas secos para garantizar el flujo de sus servicios ecosostémicos y mitigar procesos de deforestación y desertificación” en el municipio de Natagaima, Tolima. Manifiesta que “Esta experiencia me ha aportado en que no debemos limitarnos, que debemos apropiarnos de todos los campos de acción desde la comunicación, alejarnos del conformismo de las capitales que no deja ver bien las otras realidades que pasan fuera de ella”

Cada experiencia en Manos para la Paz es enriquecedora para cada uno de los practicantes, aportar a la construcción de paz en los territorios y el fortalecimiento de las capacidades locales abre los horizontes, cambia las perspectivas y da a conocer la verdadera Colombia y la razón por la cual las personas se encuentran en la pobreza extrema.

 

Apoyo periodístico:

Ivonne Contreras, practicante profesional programa Comunicación Social campus Villa del Rosario